"Al principio me sentía solo, pero me dieron la mano más grande"

Llegó hace pocos días desde Benfica, donde juega, para unirse a la preparación de la Selección Sub 20. Mientras sus compañeros de equipo disfrutan de unos días de vacaciones él entrena con la celeste, pero les lleva una ventaja. En Benfica, si los futbolistas llegan con más peso del que se fueron, deben pagar una multa. Si aumentan 500 gramos, les descuentan del sueldo 500 euros, si engordan un kilo son mil euros y así sucesivamente. Como "Jona" come en el complejo y entrena en doble horario no tendrá problemas al volver,

SILVIA PÉREZ

-¿Cómo fueron los primeros tiempos en Portugal?

-Difíciles. Sobre todo porque cuando llegué el otro uruguayo, Maximiliano Pereira, no había regresado de las vacaciones y no había nadie que hablara español. Después llegaron él y otros compañeros como los argentinos Aimar y De María, el español Reyes y Suazo de Honduras y me fui acostumbrando. Somos más extranjeros que portugueses.

-¿Los entrenamientos son muy diferentes?

-Sí, un poco más intensos y, además, mojan mucho las canchas y el juego es muy rápido. Ahora que estoy entrenando acá con la selección, me siento más lento, pero es por la cancha que está seca y la pelota va más despacio. Al principio me preocupé, pero después me di cuenta que no soy yo ni mis compañeros sino que extraño la cancha mojada.

-Al principio arrancó como titular, ¿qué pasó después?

-Vino Reyes y el técnico optó por ponerlo a él. Yo esperé en el banco, pero de a poco fui sumando minutos y eso me permite ir haciendo más experiencia. No tengo que olvidar que recién llevo seis meses en Benfica, el mismo tiempo que estuve en la Primera de River Plate y que me permitió tener un pase a Europa con solo 18 años. Es algo que estoy disfrutando.

-¿Y el resto de la vida?

-Bien, vivo en Lisboa, cerca de donde se entrena, en un barrio que se llama Campo Lide. En una casa que por suerte compartí un buen tiempo con mi papá y mi hermana que fueron para acompañarme. Los primeros dos meses viví con Maxi Pereira y su señora. Y les estoy muy agradecido porque si no fuera por ellos no sé que hubiera hecho. Me sentía muy solo y ellos me dieron la mano más grande.

-Es bueno eso de la solidaridad uruguaya, ¿no?

-Sí. Fui sólo y siendo muy joven a lucharla a un país desconocido. Ellos ya estaban más acostumbrados y me ofrecieron quedarme en su casa. Capaz que al principio yo me sentía incómodo y ellos también, pero me abrieron su casa solo por ser uruguayo.

-Cambiemos el tema, ¿cómo se siente en la selección Sub 20?

-Muy bien, arranqué hace pocos días, pero a algunos compañeros ya los conocía. Y a los demás los voy conociendo. Hay una gran unidad en el grupo.

-¿Le preguntan sobre su experiencia europea?

-Sí, es normal. Preguntan sobre jugadores conocidos, sobre cómo nos va y si nos costó adaptarnos. Es lindo contarles porque hoy o mañana ellos pueden vivir lo mismo que estamos viviendo Tabaré (Viudez) y yo, y por lo menos ya saben cómo son las cosas.

-¿Para qué está esta selección?

-Queremos clasificar al Mundial, pero también queremos ser campeones. Sería algo muy importante para nosotros y para la historia celeste.

-El grupo no es fácil.

-No, pero hoy en día no hay nada fácil. Todos juegan bien. Por suerte todavía faltan algunos partidos y eso nos va a venir muy bien a Tabaré y a mí que casi no jugamos con los compañeros.

-Supongo que se enteró que en este torneo a River no le fue de la misma forma que en el anterior, seguramente por los jugadores que se fueron entre ellos usted y Robert Flores.

-Se fue Curbelo también, pero son momentos. Antes no éramos fenómenos ni ahora son un desastre. Además, está levantando.

-¿El técnico de Benfica se parece a JR?

-No, (risas) JR es único.

-¿Y con Diego Aguirre como se siente?

-Bien, ya me conocía de chiquito porque mi padre trabajó como equipier en River Plate mucho tiempo y Diego jugaba. Era medio mascota de él. Je.

-¿Ya consiguió una novia portuguesa?

-Eso no se pregunta…pero algo de eso hay. La conocí en un shopping hace un mes atrás y cuando me dijo cómo se llamaba me tenté: Mafalda. Le pedí el teléfono y el msn y empezamos a hablarnos. Ha sido mi mejor profesora de portugués.

Ojos de maestro

"Es otro jugador que el que conocimos en la Sub 17, es increíble como maduró por lo que hizo en River con Carrasco y por estos meses en Europa", dijo Tabárez.