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EL ANÁLISIS por Edward Piñón
Las chicas del handball, como antes las del hockey, están pidiendo a gritos un poco de colaboración para poder prepararse de la mejor manera.
Se le vienen campeonatos importantes y todo gira en torno a un panorama complicado. Y, la verdad, que provoca dolor ver que los esfuerzos en Uruguay son prácticamente exclusividad de los deportistas y de sus familiares.
Es cierto que el Comité Olímpico Uruguayo suele aparecer con algún aporte y que, en menor medida, el Ministerio de Turismo y Deporte ha realizado algún movimiento, pero todo es escaso. Entonces, termina siendo a corazón y bolsillo de las familias
No puede ni debe ser así. De una vez por todas tiene que venir una política de Estado. Que aparezcan ideas que estimulen el respaldo de las empresas privadas a las actividades deportiva.
Por otra parte, el handball como el hockey son deportes que perfectamente podrían reportarle a Uruguay satisfacciones importantes.
Eso sí, para no esperar tanto, ¿no hay alguien que ahora pueda ayudar a las chicas concediéndoles una cancha para entrenar todos los días?
Ovación digital
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