Peñarol voló hacia su Maracaná

Allá fue Peñarol a Madrid, con "Tito" Goncalves -padre- integrando la embajada.

Fue porque la necesidad tiene cara de hereje y vienen bien 100.000 euros, a riesgo de recibir "de propina" un resultado devaluatorio, ultrajante, como el 4-0 sufrido, también en Madrid, hace 12 años.

Peñarol fue a Madrid, además, como vinieron a Montevideo en más de una ocasión, ya veteranos, los futbolistas de Brasil del 50 a jugar y hasta compartir celebraciones con los rivales celestes que en la final de Maracaná los habían -deportivamente- humillado, pues Real Madrid festeja el martes aquel 5-1, también humillante para Peñarol, con el que ganó su primera Intercontinental hace 50 años.

Para Peñarol aquella fue una lección tan útil como la de Maracaná para los brasileños, que por eso mismo les duele, pero son los primeros en negarse a enterrarla.

De esa vergüenza, Brasil aprendió y se constituyó en el fútbol más laureado del mundo; de la otra vergüenza, Peñarol aprendió y construyó la década más gloriosa -sumando títulos locales e internacionales- de un club en el fútbol uruguayo.

¿Y vos qué decís?

www.ovaciondigital.com.uy