La vuelta de un hombre asociado a la gloria

Tras haber dejado al club hace unos meses, retoma Diego Aguirre la conducción del plantel principal de Peñarol. Su nombre está asociado a grandes glorias de los carboneros, ya como jugador y como técnico. Desde su histórico gol ante América de Cali en Santiago para el último título continental del club, en 1987, pasando por el Campeonato Uruguayo del 2003 ya como técnico, para culminar con el reciente título Uruguayo del 2010 luego de un Torneo Clausura memorable en el que ganó 43 de los 45 puntos disputados.

Seguramente cuando decidió irse tras conseguir ese último Campeonato recordó lo ocurrido en el 2004, cuando se quedó en el club luego del logro del 2003 y no le fue bien. También se daba cuenta que no se podría mantener el plantel, que la situación económica no era buena y que tras la formidable campaña del Clausura el paladar del hincha se había vuelto muy exigente y que todo lo que viniera sería poco. También pensó en salir del país por un tiempo para probar en otro ambiente y mejorar su economía.

Antes de lo que pensábamos, retorna a filas aurinegras. El desafío es grande, aunque no tanto como cuando llegó a principios del 2010 y todo parecía muy difícil. En aquel momento se hizo una campaña notable y los rivales habituales hicieron muy mal las cosas para facilitarla.

Aguirre tiene claro que es casi imposible repetir una actuación como la del Clausura 2010, pero querrá acercarse lo más posible. Deberá elegir tan bien como entonces a las incorporaciones y a quienes dará de baja para luego implantar su idea de juego que entonces fue muy efectiva y seductora por lo agradable del juego practicado.