Una violeta y una franja en la bruma

Muy lejos. Muy atrás de todo. Sin darle al campeonato la vitalidad que sus camisetas supieron imponer en los últimos años.

Asusta su andar a los porrazos, su poca identificación con los estilos que les hicieron estar en las finales, y hasta ganarlas.

La violeta y la franja están perdidas en este certamen. Defensor Sporting es el peor de los dos, lo demuestra su decimotercer lugar en el Clausura y sus cuatro derrotas sobre seis partidos disputados.

Pero Danubio no se le escapa tanto, porque perdió tres partidos y empató uno.

¿Qué pasó con los planteles que armaron? ¿Qué sucede que no da resultado la dupla "Maravilla" Grosmüller-Recoba? ¿Por qué Tabaré Viudez o Sebastián Taborda no tienen el peso que se esperaba?

En el Parque Rodó, además, parece que el "faro" ya no ilumina con la misma definición y por eso pasaron de un día para el otro a distintos estilos de conducción.

En la Curva cambiaron de timonel, pero van a precisar que a los marineros los ordenen mejor.

Si los dos siguen así, la crisis deportiva se hará más profunda.