El "Maikol" no pudo llegar a la sede judicial de Paysandú

El "Maikol" es un conocido delincuente por la Policía sanducera. Sin embargo su nombre cobró mayor notoriedad por ocasionarle la muerte a la joven profesora sanducera Romina Severo , durante un arrebato ocurrido el 24 de agosto.

Ayer, el ahora mayor de edad (el martes cumplió 18 años), fue trasladado a la ciudad de Paysandú desde dependencias del INAU en Montevideo para declarar ante la Justicia, por orden del juez penal de Cuarto Turno, Pablo Dalera, informa esta mañana el matutino El Telégrafo.

Sin embargo no pudo ingresar a la sede del Poder Judicial. En la pasada mañana, el "Maikol" fue visto en el Hospital Escuela del Litoral, donde ingresaba para ser sometido a exámenes de rutina luego de un traslado, para corroborar que no haya sufrido excesos sobre su persona.

De acuerdo a la crónica del matutino, rápidamente se generó una cadena de mensajes de texto informando sobre la presencia del delincuente y organizando una nueva marcha de protesta frente al juzgado, a partir de las 14 horas.

Las autoridades judiciales y policiales se enteraron de esta posibilidad y se hizo vivo el recuerdo del 26 de agosto, cuando más de 300 personas en forma espontánea rodearon la sede judicial exigiendo justicia contra el entonces menor de edad.

El personal del juzgado también pidió que no llegara al edificio por "razones de seguridad". La Justicia decidió entonces llevarlo al Juzgado de Paz que funciona en la localidad de Tambores.

Al finalizar, el "Maikol" regresó a Montevideo mientras continúan las investigaciones.

Declaró lo mismo que su cómplice

La nota del matutino sanducero agrega que tanto el "Maikol" como su cómplice, de 17 años, declararon "exactamente lo mismo" ante el juez Pablo Dalera.

El magistrado envió el expediente al Ministerio Pública y el fiscal tendrá seis días hábiles para acusar. Luego lo recibirá la defensa quien tendrá la misma cantidad de días para contestar y finalmente llegará la audiencia, donde se dictará sentencia.

Dalera afirmó que en Tambores se desarrolló "una audiencia para ver en qué situación están ambas personas. En ella tienen la posibilidad de agregar datos, declarar alguna otra cosa o de mantenerse en el mismo relato".