Tienen el corazón indomable

No hay como el futbolista uruguayo. Digan lo que digan, es de lo mejor. Quizás (o sin quizás) no tenga la técnica depurada del brasileño, la estética y el manejo de pelota del argentino ni la velocidad del colombiano o del peruano, pero tiene un amor propio a prueba de todo. Ese no querer perder por nada del mundo, esa entrega incondicional, esa rebeldía indomable, lo hace diferente a cualquiera.

Y pruebas al canto. ¿Cómo se explica esa lucha sin cuartel de los jugadores de Tacuarembó? ¿Qué les queda a los hombres de Miramar Misiones? ¿Qué lleva a pelear cada partido como si fuese una final cuando saben que su destino está prácticamente marcado?

Ese amor propio es lo que siempre sacó adelante a los equipos. No sólo acá, en cualquier parte del mundo. Por eso el futbolista uruguayo juega en todos lados y se destaca. ¿O acaso no hay delanteros en Brasil? Pero el "Loco" Abreu, con más años que todos, hace la diferencia. ¿No hay volantes como el "Ruso" Pérez en Italia? Montones, pero con el corazón del "Ruso" difícil. Son los mejores.