Nacional va ganando otro clásico

Once contra once y la pelota picando, reza el dicho futbolero que viene como anillo al dedo para describir la geografía en la cual están insertas las directivas de Nacional y Peñarol, de espaldas al Torneo Apertura y de cara a la segunda mitad de la temporada, donde -por un tema cronológico- ambos "se juegan los garbanzos".

Más allá también del otro dicho, según el cual "los campeonatos se ganan en los períodos de pases", hoy no sólo ese aspecto que es muy importante, como lo demostró -por si hacía falta- el caso de Peñarol en los primeros seis meses del año.

Es decir, ganar Copa y Uruguayo a la vez, es casi imposible; los ejemplos sobran, no ya en Uruguay, sino en el fútbol sudamericano.

La opción -o la preferencia- entre esos objetivos, pues, lleva al análisis; y el momento es ahora, cuando no sólo hay que reformular planteles, sino también decidir políticas deportivas a llevar a cabo.

La pelota, entonces, está picando; pero los 11 de la Comisión tricolor le van ganando 1-0 a los 11 del Consejo aurinegro: con Nacional clasificado para la definición del Uruguayo, pueden apuntarle a la Copa con todo y, llegado el caso, dejar la opción para más adelante.