GASTÓN PÉRGOLA
El caso del catequista acusado de abusar de seis niñas (de entre 3 y 6 años) del colegio Clara Jackson sigue sin resolverse. Ahora, la jueza solicitó una pericia psicológica al indagado, que se sumará a la psiquiátrica ya realizada en diciembre pasado.
El expediente del caso del catequista sigue sin una resolución, a más de medio año de iniciado. En una nueva audiencia realizada ayer, en la que participó la directora del colegio Clara Jackson, Gloria Font, la directora pastoral de la institución, Ana Ucelli, y un testigo de la defensa, se solicitó una pericia psicológica al catequista, que puede demorar el caso unos 4 meses más.
El principal problema es que el Instituto Técnico Forense (ITF), que está al frente de este tipo de tareas, se encuentra desbordado y con un atraso importante (de 3 a 4 meses) en los trabajos periciales. A su vez, faltan las declaraciones de una bibliotecaria y una docente del colegio, que ayer no se presentaron a declarar.
"Me preocupa que se siga demorando el tema. La ansiedad en este hecho, que tiene ya varios meses se está extendiendo y ya urge una resolución para terminar con el tema de una vez. Es mucha la angustia que vive mi cliente, y más desde su convencimiento de que es totalmente inocente", dijo a El País la abogada del indagado, Inés Massiotti, a la salida de la audiencia que duró cerca de cuatro horas.
El caso comenzó en septiembre del año pasado cuando el colegio Clara Jackson presentó una denuncia a la Seccional Policial Nº 12 y ante la Asociación Uruguaya de Educación Católica (Audec) por un supuesto abuso de uno de sus docentes hacia una menor alumna, según la información brindada por la madre de la niña. Al poco tiempo, otras cinco madres hicieron lo mismo, acusando al docente de haber abusado de sus hijas.
PERICIAS. En diciembre del año pasado el catequista había sido sometido a una pericia psiquiátrica, que determinó que se trataba de una persona consciente de sus actos, por tanto, imputable. Pero, según informó la abogada del indagado, el Instituto Técnico Forense pidió además una pericia psicológica en su momento, cuya notificación nunca llegó a destino.
La fiscal del caso, Dora Domenech, explicó a El País que la pericia psiquiátrica (a la que fue sometido el acusado) difiere de la psicológica, debido a que mientras la primera busca determinar si el indagado es imputable, la segunda refiere a rasgos de personalidad del individuo y posibles trastornos o complejos psicológicos.
Las seis niñas supuestamente abusadas también fueron sometidas a pericias psicológicas, en un proceso que llevó varios meses. Para cada niña periciada se designó a una psicóloga distinta.
Si bien el expediente sigue en estado de presumario, fuentes del caso afirmaron que entre las principales conclusiones del estudio, resulta que las pericias "no son concluyentes", que las declaraciones de las menores "no resultan totalmente espontáneas", y se recomienda no seguir interrogándolas.
Cómo empezó todo
El viernes 13 de agosto del año pasado una madre cuya alumna asiste al colegio Clara Jackson informó a la dirección del instituto sobre una "conducta inadecuada" de un educador. Según el colegio, era la primera vez que recibía una denuncia de tal naturaleza.
A los dos días de enterados, la dirección del colegio cita al educador (catequista) a una reunión, y posteriormente hace lo mismo con la familia de la niña.
El mismo día de la reunión con las autoridades del Clara Jackson, el catequista, molesto, presenta su renuncia. La misma es aceptada de inmediato por el Clara Jackson.
Ante la inquietud de algunos padres que consultaron sobre el despido del educador, la dirección del colegio informa solamente a los padres de niños con los que trabajaba el catequista.
Más tarde debió hacer público el caso a la totalidad de los padres. "Lamentamos que muchas familias se enteraran por la prensa. Se había prometido reserva del caso (entre los involucrados), pero no fue así. Nos tomó totalmente por sorpresa la aparición y manejo mediático del caso. Pedimos disculpas a los padres", rezaba una misiva dirigida a todos los padres de alumnos del Clara Jackson.