Serie de bombas matan a 10 personas en Irak

Varias explosiones mataron hoy por lo menos a 10 personas e hirieron a muchas más —en lo que un funcionario iraquí describió como un ataque sectario— en la ciudad iraquí de Karbala, donde los residentes aún no se han repuesto del mortífero asalto contra un autobús en una zona suní a principios de mes.

Los funcionarios gubernamentales dijeron que cuatro explosiones sacudieron la ciudad de Karbala hacia las 10 de la mañana a lo largo de cinco minutos, lo que indica que seguramente se trató de un ataque coordinado.

Una espesa columna de humo negro se alzaba sobre la oficina del Ministerio del Interior en Karbala, donde son emitidos los documentos de identidad y que fue el objetivo de dos bombas.

Otra explosión tuvo lugar cerca de una vivienda, dañando sus muros y techo. Por lo menos una bomba más fue detonada a casi un kilómetro (media milla), del santuario del Imán Abbas.

Tres funcionarios gubernamentales de Karbala _los concejales provinciales Mohamed al-Musaui y Hussein Shadhan al-Aboudi, y el parlamentario Jawad Kadim al-Hassnawi_ dijeron que en la explosión murieron 10 personas y que el número de heridos oscilaba entre 40 y 90.

Los informes contradictorios sobre el número de víctimas son comunes debido a la confusión que suele reinar inmediatamente después de ataques importantes en Irak.

"El propósito de esas explosiones es desatar la sedición sectaria, tras el asesinato de 22 residentes en Karbala en el desierto de Anbar hace dos semanas", dijo al-Aboudi. "Intentan además desestabilizar la seguridad en Karbala".

Se refirió al atentado del 12 de septiembre contra un autobús de peregrinos chiíes procedentes de Karbala secuestrado en la provincia suní de Anbar, camino de un santuario en la capital siria de Damasco.

Los atacantes, que vestían uniformes militares, ordenaron que se apearan los 22 hombres que viajaban en el autobús y los mataron en una remota zona desértica cercana a la carretera.

El primer ministro Nuri al-Maliki ha intentado disminuir las tensiones entre las autoridades de Karbala y Anbar desde el ataque. Cuatro sospechosos se encuentran detenidos en relación con el caso y los asesores militares de al-Maliki consideran que por lo menos algunos extranjeros participaron en la conjura.

AP