Y quisieron robarle la casa

Un grupo de asaltantes fue repelido de las adyacencias de la residencia de John Terry cuando el zaguero inglés jugaba para Chelsea ante Tottenham por la Premier League, informó hoy la prensa local.

El diario Daily Mail reportó que mientras el también capitán de la selección británica jugaba el jueves por la decimoséptima fecha del torneo local un derby de Londres, unos delincuentes irrumpieron en el parque que circunda su casa.

Los supuestos asaltantes, siguió el diario, rompieron el candado con un palo y cuando se dirigían a la vivienda fueron alejados por agentes de seguridad privados.

En la casa se hallaban la esposa de Terry, los hijos gemelos de 4 años de la pareja, la madre y la suegra del zaguero, que había contratado más seguridad tras haber sido acusado de emitir insultos racistas por la Asociación Inglesa de fútbol (FA).

"Están todos en estado se shock por el hecho, especialmente porque en la casa estaban los niños y las dos abuelas. Fue una experiencia atemorizante para todos, en un momento muy difícil para la familia", contó un amigo al diario.

Terry, de 31 años, fue acusado ante la FA por el defensor de Queens Park Rangers Anton Ferdinand de haberle proferido insultos racistas en octubre pasado, lo que derivó en reproches de los aficionados de los equipos de la Premier League. (ANSA)