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DESDE EL TOUCH por Ceibal Regules
El rugby vivió su acto eleccionario, de primer grado, siendo nominados los ocho futuros miembros para conducir la URU, durante dos años; período que puede pasar a ser de cuatro años, si los clubes amplían el mandato, de acuerdo a los nuevos estatutos en trámite de aprobación dentro del Ministerio de Cultura.
Viene ahora la segunda instancia, la distribución de los cargos de la mesa. Aquí no estarán los clubes, participaran tan solo los ocho miembros electos, sin estar ninguno de ellos estatutariamente mandatados. Pese a esto, los clubes hicieron una recomendación para designar determinado miembro como presidente.
Esto último no estaría siendo respetado por algún miembro representativo del continuismo directriz, situación que determinó muchas idas y venidas en la búsqueda de apoyos.
Denuncian falta de lealtad por parte de algunos, en tanto que la contraparte se siente fuerte por una mayoría de votos.
Los tres miembros identificados previamente con el cambio de conducción, miran, podrían aportar otra solución.
Será necesario superar desencuentros con sabor amargo.
El País Deportivo
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