Lástima: es una mancha para el tigre

El Ejecutivo que preside Sebastián Bauzá mantiene un invicto destacable: bajo su administración, por ningún motivo se postergó -como ocurría reiteradamente antes- la fecha de comienzo de los campeonatos.

Hubo otros problemas, cierto; pero, mal o bien, los neutrales zurcieron, "la ataron con alambre", y el mundo siguió andando. "El show debe continuar"; eso es lo importante.

Por todo eso, aunque el tema no compete directamente al Ejecutivo, el 3-2 de la votación de la Mesa por el cual no se aplazó Defensor- Racing, es -sino la primera- una de esas "frangolladas" que no son para pasar por alto.

Mejor dicho: si en otras ocasiones, por los viajes de la Copa, se "corrieron" partidos de los grandes, esta vez se dio lugar a una polémica innecesaria y, por tanto, evitable. Con aplicar el "cliché", bastaba.

Dejar a un lado ese procedimiento tan elemental, significó una regresión al lugar donde las decisiones políticas se anteponen -por intereses deportivos- al sentido común; y lo que es peor: el hilo se cortó por lo más fino: un equipo chico. Por la propia gestión del Ejecutivo, una lástima.

¿Y vos qué decís?

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