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EL ANÁLISIS por Edward Piñón
EL ANÁLISIS por Edward PiñónUna pausa en el fútbol espectáculo
Vivió apasionadamente su prolongado vínculo con el Barcelona y decidió que era hora de hacer una pausa, para evitar que el desgaste natural arruinase su relación con los jugadores que tan bien interpretaron su idea futbolística.
La pausa que pone Pep Guardiola frena una carrera de triunfos y alegrías. Detiene la marcha del equipo que batió marcas, que conquistó corazones. Es el fin de un ciclo, de una era de goles extraordinarios, de dominio abrumador en la tenencia de la pelota, de un brillo futbolístico como pocos se han visto a lo largo de la historia. De una interpretación tan querible del fútbol.
Y pensar que alguna vez supuse que lo de Holanda de 1974 iba a ser insuperable.
Con la pausa de Guardiola se detiene el fútbol espectáculo. Y nadie sabe por cuánto tiempo.
Porque Guardiola seguramente volverá, pero quizás ya no sea lo mismo. A lo mejor le cuesta encontrar unos solistas tan maravillosos como los que hicieron que la "música de los pies" encantara al mundo entero.
El Pep decidió detenerse. Lo que le dejó al fútbol fue excelente.
¿Y vos qué decís?
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