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MI OPINIÓN POR NANDO PARRADO
MI OPINIÓN POR NANDO PARRADO
En mi anterior editorial comentaba mi sorpresa cuando fui a pagar la patente de mi auto, que como es un año más viejo y su valor ha bajado en el mercado, supuse que la patente iba a bajar, pero no fue así, por el contrario, se incrementó un 20%.
Pero peor me fue cuando quise averiguar el motivo, dirigiéndome a la Intendencia montevideana y luego al Sucive. En ningún lado pude obtener respuesta.
¿Por qué los uruguayos somos rehenes de la prepotencia regulatoria sin límites y sin la más mínima eficiencia? Si alguien hubiera respondido mis pedidos de información, por la suba de la patente de un auto que es más viejo, tal vez hubiéramos tenido un diálogo sensato y se hubieran dado cuenta de su error o me hubieran explicado por qué ese auto paga cada vez más.
Pero es imposible en este país, donde la eficiencia de los empleados públicos es muy mala. Si el Sucive fuera una empresa privada, por lo menos tendría teléfonos que funcionen, atención al cliente y una dirección física a la que los clientes que pagan, puedan ir a realizar sus consultas...
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