Los países latinoamericanos culminaron su aventura en Beijing 2008 con un retroceso en la cantidad de medallas doradas logradas. Se pasó de las 18 obtenidas en Atenas a sólo 11. Salvo notables excepciones, la mayoría de los países latinos participantes de los juegos quedaron insatisfechos con su actuación.

El caso uruguayo ya es conocido . Las esperanzas celestes eran humildes –en general muy lejos de las preseas- y aún así nuestra delegación se sintió disconforme con su actuación. Es que en general los uruguayos produjeron por debajo del nivel del que son capaces.

En Cuba, otrora potencia olímpica, la decepción fue aún mayor. Por primera vez en 36 años –exceptuando las ediciones en las que no participó- los isleños no fueron el país latinoamericano con más medallas de oro. Ese honor recayó en Brasil.

Cuba concluyó su participación olímpica con tan solo 2 medallas de oro, 11 de plata y 11 de bronce, con grandes decepciones en béisbol y voleibol femenino, disciplinas que no aportaron las preseas doradas esperadas. El boxeo, donde supieron ser potencia, también decepcionó.

Brasil, el mejor representante latino, retornó a casa con un sabor agridulce. Obtuvo oros inéditos en natación, donde César Cielo ganó los 50 libre, en atletismo femenino, donde Maurren Maggi triunfó en salto largo, y en voleibol femenino.

Sin embargo, la medalla que los brasileños más querían, la de fútbol masculino, quedará una vez más postergada. La selección de Dunga no sólo no cumplió el objetivo sino que fue eliminada por su clásico rival, Argentina, a la postre oro olímpico.

El fútbol femenino y el voleibol masculino también sufrieron dolorosas derrotas antes los seleccionados estadounidenses en las finales de sus disciplinas.

En total, la delegación brasileña trajo a su tierra 3 medallas de oro, 4 de plata y 8 de bronce.

En la otra cara de la moneda se ubican países como Panamá, que logró su primer oro olímpico gracias a Irving Saladino en salto largo, México, obtuvo dos oros en taekwondo, y Argentina, que trajo de China tres oros, incluyendo el bicampeonato olímpico de fútbol masculino.

Los argentinos mantuvieron el nivel de Atenas 2004 con seis medallas (2 oros y 4 bronces) y pudieron festejar una nueva victoria en fútbol masculino con el sabor agregado de haber dejado por el camino a Brasil con un contundente 3 a 0 en el partido de semifinales.

La otra medalla dorada llegó vía la dupla de ciclistas Juan Curuchet y Walter Pérez.

De los bronces, se destacó el obtenido por "Las Leonas", la selección de hockey femenino que cayó en semifinales ante Holanda y derrotó a Alemania en la pelea por el último lugar en el podio.

El otro país latino en conseguir una presea dorada fue la República Dominicana, oro en boxeo, peso welter ligero, de la mano de Félix Díaz.

Del resto, Colombia atrapó una plata y un bronce; Chile y Ecuador arañaron sendas platas y Venezuela salvó un bronce.

La medalla ecuatoriana es significativa ya que fue conseguida por el legendario marchista Jefferson Pérez, quien volvió al podio en la que fue su última cita olímpica. Pérez había conseguido el primer oro olímpico de su país en Atlanta 1996.