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MARIANELLA APÓLITO
A la hora de hacer balances deportivos, económicos e históricos, siempre aparecen "ellos".
Por diferentes motivos, tal vez y justamente por los mencionados anteriormente, "ellas" quedan afuera de los textos, las imágenes y los recuentos.
Sin embargo, más de una mujer marcó la línea del tiempo en el deporte y especialmente en el 2008.
Más de una es imagen de belleza y profesionalismo. Son varias las que gracias a su trayectoria han obtenido premios millonarios y poderosos contratos publicitarios.
Gracias al talento, a las raquetas, palos de golf y garrochas, varios miles de dólares se sumaron a sus cuentas bancarias en el año que recién se fue.
Y esa capacidad que las colocó en la cima de los podios es la misma que las instaló en las pantallas publicidades internacionales de las mejores marcas, suceso que aumentó aún más su capital.
Por todo esto, es momento de pasar raya. Sacar números. Y dedicarles un par de párrafos a las deportistas más adineradas, que estarán en la historia por su capacidad y quedarán en la retina de más de uno por su repetida imagen en espacios publicitarios.
Un claro ejemplo de ello son las hermanas Williams, Venus y Serena, actual número dos y seis de la WTA.
Teniendo en sus manos tres medallas de oro de Juegos Olímpicos, 37 torneos de WTA, entre ellos 7 Grand Slams, Venus llevó adelante una carrera lucrativa como pocas.
La mayor de las hermanas, que comenzó su trayecto profesional en 1990, logró recaudar en premios casi 21 millón y medio de dólares a la fecha, de los cuales tres los reunió este año.
Serena, que se insertó en el profesionalismo cinco años después, en 1995, logró superar a su hermana no sólo en lo deportivo sino también en lo económico.
Hasta ahora ha conseguido nueve títulos de Grand Slam además de las siete victorias en dobles conseguidas junto a Venus.
Gracias a esos triunfos y varios más, son casi US$ 22 millones los que recaudó a lo largo de su carrera y, de esos, casi cuatro en el 2008.
Empero, comparado a lo que ganan por contratos publicitarios, muchas veces los premios son un vuelto.
Luego de un contrato con Puma y Rebook, Serena y Venus firmaron, partir del 2004 y por cinco años, con la marca deportiva Nike por un monto equivalente a 40 millones de dólares. Las hermanas se reparten ocho millones de dólares por año gracias a este acuerdo y estas cifras, obviamente, las colocaron como las atletas femeninas mejor remuneradas.
Pero, con el pasar de los años, esto fue cambiando y resultaron ser más de dos las mejores pagas dentro del deporte.
María Sharapova, actual número 9, recaudó más de 12 millones de dólares en premios, superando el millón y medio esta temporada.
Sin embargo, el tenis es el peor negocio para la rubia, dueña de los gritos que llegan hasta los 100 decibeles y suele sacar la ira de rivales.
Por auspicios, María hace más de 26 millones por año. Todos quieren a la bella mujer del tenis en sus filas y sólo Motorola, Nike, Gatorade, la firma de relojes de lujo Tag Heuer y Canon contaron con ella.
El tenis las llena de plata, pero el golf no se queda atrás. El deporte más caro del mundo es otro de los que reparte miles y miles de dólares en premios y deja a sus reinas con los bolsillos bien llenos.
Lorena Ochoa, la mexicana que llegó a lo más alto del ranking mundial de mujeres golfistas LPGA (Ladies Professional Golf Association) recaudó en el pasado 2008 casi tres millones de dólares, convirtiéndose, luego de Serena -primera- y Venus -segunda- en la tercera deportista mejor paga en el año que se fue.
Ochoa pasó a la historia por ser la primera jugadora en obtener más de 4 millones en una sola temporada, y se transformó en la favorita de las empresas patrocinadoras.
Pero esto no sólo se debe a sus méritos deportivos. Ochoa es un caso aparte.
La mexicana administró muy bien su buena fortuna, que llega casi a los US$ 14 millones, y logró así vigorizar su imagen y generar negocios propios, vinculados con el golf y el deporte en general.
Junto a su hermano Alejandro, a través de Ochoa Sports Management, opera eventos de golf y torneos corporativos, y representa deportistas, partiendo por la misma Lorena y su entrenador, el golfista Rafael Alarcón.
Sus principales patrocinadores son Citigroup-Banamex, Lacoste y Audi, que visten su atuendo deportivo, y otras empresas como Rolex, Ping y Aeroméxico, con derechos exclusivos sobre su imagen.
La imagen de quien batió 24 veces la plusmarca mundial del salto con garrocha, dejándola en 5.05 metros en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, vende y mucho.
En lo deportivo, Yelena Isinbayeva, la "emperatriz rusa", ganó US$ 100.000 por cada récord mundial.
A eso hay que sumarle el lingote de oro valuado en un millón de dólares que obtuvo en el 2007 por hacerse poseedora del "Jackpot", premio otorgado por la Golden League.
Isinbayeva, que conquistó título y récord del mundo en la final olímpica de salto con garrocha en Beijing 2008, es la primera mujer que ha obtenido por tres años el galardón de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF). Ya fue distinguida con el mismo trofeo en 2004, 2005 y el pasado 2008, en que resultó ser la mejor atleta junto a Usain Bolt.
Pero, tal como sucede con su compatriota Sharapova, el atletismo es su peor negocio.
Adidas, uno de los sponsors de la atleta, se tomó el trabajo de fabricarle unos championes celestes con un delfín -su animal favorito- en el talón para que compitiera con ellos en Beijing.
Se estima que por año la marca de las tres líneas brinda un millón de dólares a la rusa, que sumado al 1,2 millón que le otorga Toshiba, su otro auspiciante, dan como resultado una cifra interesantísima en su saldo bancario.
Si bien Roger Federer -que tan sólo por el contrato con Nike recibe poco más de 100 millones de dólares, con regalías a su favor-, Tiger Woods -que obtiene 74 millones de euros por año a la hora de sumar a todos sus auspiciantes- y David Beckham -millonario por doquier- logran llenar sus bolsillos y desbordarlos también, las mujeres demostraron no quedarse atrás.
Tal vez en cifras menores, tal vez por estar inmersas en un mundo generalmente machista en todos los aspectos, tal vez por simples diferencias contractuales a la hora de negociar.
No es necesario decir que hay una gran diferencia si se miran los números de uno y otro.
Sin embargo, lo importante acá no es el monto, pues siempre se habla de millones de dólares.
Lo que cabe resaltar es el talento de cada una de ellas y esa capacidad que las instaló definitivamente en la "lista VIP" de las deportistas más destacadas, más requeridas y adineradas.
3 AÑOS recibió el galardón de la Federación Internacional como la mejor atleta del año.
2,5 MILLONES de dólares ingresa Isinbayeva cada año por contratos publicitarios.
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