MIRADA DESDE ADENTRO

Para el especialista Musa Kamel, los países árabes y los latinoamericanos sufren del mismo mal que ahora se extiende como epidemia por el planeta

¿Asombroso y lamentable parecido?

PATRICIA CASTRO CASTRO OBANDO
Enviada especial
El Comercio de Lima, GDA

Ammán.- Saddam Hussein es como si tuvieras un hermano mayor que te pega duro y te maltrata. Es malo, pero sigue siendo tu hermano". Esta reflexión, simple pero concisa, nació en la última reunión de la Liga Árabe.

Fue el único acuerdo al que llegaron los líderes de los países musulmanes. El objetivo de la cita era detener el conflicto como frente organizado y, sin embargo, por poco se declaran la guerra.
Musa Kamel es un palestino que vive en Jordania, especialista en la política interna del Mundo Árabe. Ha vivido 35 años en Latinoamérica y está convencido de que ambas regiones fueron cortadas con la misma tijera. La de Estados Unidos. Prefiere que lo llamen Moisés, aunque dice que, como va el mundo, nunca verá la tierra prometida.

¿Por qué los países árabes fracasaron nuevamente en lograr la unidad de la liga?

Por que cada uno canta su propia melodía. Arabia Saudí es el primer exportador del petróleo, podría comandar la Liga Árabe, pero tampoco le conviene. Ningún país árabe es totalmente libre. Cada uno depende de sus relaciones con las potencias a las que vende el petróleo. Son países ficticios, tribus que se han unificado y forman un Estado. Sus gobernantes son marionetas impuestas, no han sido electos por el pueblo.

¿Cuál ha sido la relación de Iraq con otros países árabes?

Tensa, conflictiva pero Iraq es secretamente admirado. Es como el chico malcriado que le falta el respeto al profesor del aula y es expulsado fuera del salón. Nadie quiere que le pase lo mismo, entonces todos se portan bien. Es cierto que Hussein es un nacionalista y un tirano. Pero ningún gobernante árabe puede decir que no es también un dictador. Manejan la economía de cada país como si fuera la caja chica. Y el pueblo solo recibe migajas.

¿Es posible pensar en democracias en esta región acostumbrada por tradición a las monarquías?

Hasta los supuestos países republicanos árabes son en realidad monarquías disfrazadas. A EE.UU. no le convienen democracias consti´ tuidas en el Medio Oriente porque pueden generar gobiernos nacionalistas que terminen buscando su independencia o soñando con una Liga Árabe. Esto es peligroso porque estas naciones son dueñas de reservas de petróleo, y quien controla el petróleo controla el mundo.

¿El sueño de la Liga Árabe es parecido a la unión de las naciones latinoamericanas?

Me parece que sí. Empezando porque ambos proyectos se quedan en los buenos deseos. Así como sucede en el mundo árabe, los países de Latinoamérica tienen una relación de dependencia económica con Estados Unidos. Si levantan la voz, son echados fuera de la clase, y sus gobernantes, calificados como tiranos y dictadores. Le pasó a Cuba y le pasa a Venezuela. Y aunque es cierto que los presidentes vetados suelen caer en la tiranía del poder, también es verdad que al Gobierno Estadounidense no le conviene un frente común. Ni aquí ni en ninguna parte del universo.

¿Como el caso de la Unión Europea, que se ha fraccionado?

A Estados Unidos no le favorecía esta unión, con el tiempo podría afectar de gran manera sus intereses económicos. Le ofreció a Gran Bretaña un trozo de pastel y Tony Blair pensó que con un mundo polarizado era mejor estar al lado del dueño de la fiesta. El presidente español José María Aznar se invitó solo. Con estas acciones, Gran Bretaña y España resquebrajaron la frágil Unión Europea, a la cualahora no le veo ningún futuro.

¿Qué pasará con la Organización de las Naciones Unidas?

Ya no existe en la realidad. Fue creada para cuidar la paz mundial uniendo voluntades y equilibrando los poderes de las naciones. Despojada de esta función por EE.UU. y sus aliados, no le queda más que ocuparse de la asistencia humanitaria para los refugiados. Pero ese papel es más de la Cruz Roja.

Según la impresión de los árabes, ¿quiénes son los responsables de tanta desunión?

Es una gran conspiración de los sionistas. El sionismo involucrado en la política estadounidense está formado por judíos no religiosos que tratan de llevar a cabo el sueño del Gran Israel, que iría desde el Nilo hasta el Éufrates. Los sionistas controlan también la economía estadounidense, los medios de información y la industria bélica. Su negocio es la guerra, la recompensa y el control del mundo árabe.

¿Qué viene después de Irak?

Con el control de Afganistán y de Iraq, el mapa del territorio árabe resulta evelador. En el medio se encuentra Irán y al sur Arabia Saudí. Pero a este último no le ha llegado el turno, todavía. En cambio Irán ha quedado encerrado. Ya lo dijo Bush: "Iraq, Irán y Corea del Norte forman el Eje del Mal". Y no me extrañaría que después siga todo el planeta.