El Banco Central (BCU) prevé elaborar un Indicador Mensual de Actividad Económica, desarrollar la capacidad de monitoreo del sector fiscal y otro del sector financiero, además de analizar la efectividad de las compras de dólares que realiza.
Estos temas forman parte del Plan Estratégico del BCU 2010-2014 que fue presentado ayer al presidente de la República, José Mujica, y a los presidentes de los organismos públicos, en la segunda reunión de la Red de Empresas Públicas.
Este ámbito de coordinación fue relanzado hace 15 días por Mujica.
Tras el cónclave, el presidente del Central, Mario Bergara, dijo que lo presentado ayer consistió en "trasladar todo el proceso de trabajo interno en el que culminó en la aprobación del primer plan estratégico del BCU en 42 años de existencia".
Bergara aseguró que los aspectos previstos deben ser "interpretados como compromisos de gestión, para ser evaluados (y) medidos por el Poder Ejecutivo y la sociedad".
Dentro del plan está como meta para este año "obtener un Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) aceptable para la difusión pública" que será "difundido internamente en el período 2009-2010".
Esto daría un indicio de cómo evoluciona la economía en forma mensual, ya que el dato del Producto Interno Bruto (PIB) es trimestral y llega con un rezago de dos meses y medio (en septiembre estará el dato del segundo trimestre del año).
El BCU también prevé en el quinquenio "desarrollar la capacidad de monitoreo del sector fiscal".
Con eso podrá "analizar, proyectar y evaluar riesgos en el sector fiscal (déficit macroeconómicamente ajustado, sostenibilidad de deuda, vulnerabilidad del endeudamiento público, etc.)" y "analizar el comportamiento de la posición y los principales flujos de financiamiento del sistema financiero y del sector no financiero".
En el ámbito de la Intendencia de Supervisión Financiera se buscará "diseñar e implementar la metodología de supervisión por riesgos para Seguros, Intermediarios de Valores y AFAP".
Además de "crear un sistema de monitoreo de la estabilidad financiera doméstica".
En el aspecto monetario cambiario, el BCU se propone "analizar la efectividad de las compras de divisas desde el punto de vista de la capacidad de competencia" y relacionado con ello prevé "estimar el costo parafiscal de la esterilización monetaria derivado de la compra de divisas".
Es que al comprar dólares, el Central está volcando pesos al mercado. Para sacar esos pesos -que si no generarían presiones inflacionarias- debe emitir deuda (esterilizar en la jerga) lo que le genera un costo parafiscal debido a las tasas de interés que tiene que pagar.
Además va a "analizar y determinar el nivel óptimo de deuda del BCU" y "elaborar indicadores de Riesgo para la gestión" de esa deuda.
En cuanto a las reservas se plantea "obtener retorno positivo para los portafolios denominados en dólares con una confianza del 95%" y "renovar el contrato con el Banco Mundial para gestión delegada de reservas y ampliar número de administradores externos".
La autoridad monetaria va a realizar también acciones de educación financiera como "crear un portal educativo que contenga materiales elaborados para que escuelas, educadores, alumnos y particulares interesados en la temática puedan acceder libremente".
Incluso anuncia que va a "diseñar e implementar un sitio web de educación al inversor" y que va a "desarrollar programas de divulgación sobre productos y servicios financieros". A eso se agrega que establecerá "vínculos con las autoridades de la educación".