El vicepresidente Danilo Astori dijo que el gobierno debe hacer un "gran esfuerzo" por apelar a las asociaciones del Estado con privados, sobre todo en el área del transporte, y "no discutir" esta metodología. "Es mucho más importante recuperar el ferrocarril que discutir quién lo va a recuperar", dijo Astori tras participar en el encuentro "La crisis mundial, ajustes y políticas sociales, ¿quién paga?", organizado por el Frente Líber Seregni.
Allí el vicepresidente compartió estrado con el ministro de Economía Fernando Lorenzo, la ex ministra comunista Marina Arismendi, el diputado socialista Julio Bango y el sindicalista Richard Read, de la corriente moderada Articulación.
"Hay que discutir lo importante, que es la meta, y no el camino", indicó Astori. "Tenemos que apelar a las asociaciones con privados. No discutamos el tema de las asociaciones, aunque tengamos el cuidado de hacerlas de la mejor manera posible", alertó.
Apelando a una frase que suele usar el ex presidente nacionalista Luis Alberto Lacalle, Astori dijo que para la izquierda es momento de "pausa y reflexión". Y dijo que hoy "ser de izquierda es reivindicar la política" y "defender la política de calidad". También afirmó que el gobierno del Frente Amplio debe "dar certezas, señales claras y consistentes que se mantengan en el tiempo", así como "renunciar y combatir la mediocridad".
Y apuntó: "Toda autocrítica y propuesta de enmienda de errores es fundamental. Como dijo el maestro (Óscar) Tabárez, el recorrido es la recompensa".
El ministro Fernando Lorenzo advirtió que el gobierno seguirá siendo "interpelado por la oposición" por la supuesta "poca prudencia en el gasto". Agregó que "ninguna gestión puede exhibir prudencia fiscal y el más largo progreso social como la del Frente".
Lorenzo aseguró que, cada vez que había crisis, blancos y colorados "recortaban gastos en forma general e irreflexiva". Pero dijo que el Frente ayudó "a los más débiles y postergados", con una contribución "sin precedentes" en el gasto público social en términos de impacto distributivo.
Arismendi admitió que hoy la pregunta en materia de educación no radica exclusivamente en el 4,5% del PBI, sino que es una cuestión mucho más profunda.