Premisas siempre vigentes

El rugby se juega de XV y el juez tiene siempre razón. Son dos premisas que vienen desde 1875 cuando se limitaron los jugadores y se le dio un pito al árbitro para que aplicara las reglas del juego.

Desde hace algunos años se creó la herramienta de las "tarjetas", sanciones que no perjudiquen el espectáculo y evitando no desvirtuarlo con expulsiones justas pero estrictas en demasía. Con un jugador menos cualquier equipo se debilita y genera espacios amplios que siempre resultan beneficiosos para los rivales.

Sobre los jueces, no se admite discusión. Ni siquiera la alta tecnología que toma imágenes desde diferentes ángulos logró cambiar el principio de que el árbitro tiene razón.

El desafío a compartir por todos los clubes este año -en todas las divisionales- tendría que estar en relación directa con el conocimiento y cumplimiento de sus jugadores de las reglas de juego, adentro y afuera de las canchas.

Es común constatar desconocimientos básicos de dichas reglas, aprendidas tal vez por transmisiones orales y no apoyadas con una lectura orientada interesadamente para conocerlas y aplicarlas luego.