Aislaron al paciente afectado por la bacteria multirresistente KPC

L. COSTA DELGADO/ M. GALLARDO

El paciente infectado con la bacteria multirresistente KPC se encuentra aislado en un CTI del Sanatorio Mautone. Autoridades del MSP dijeron a El País que era "esperable" que la bacteria apareciera y que en pocos años podría diseminarse.

En el día de ayer el Sanatorio Mautone confirmó en conferencia de prensa que el paciente que sufrió una neumonía causada por la bacteria multirresistente conocida como KPC, se encuentra aislado en una de sus Unidades de Cuidados Intensivos.

Ante la confirmación de cuál había sido el agente infeccioso que provocó la enfermedad, indicaron las autoridades del centro hospitalario, se activó un plan de contingencia que incluyó el aislamiento del paciente y el seguimiento estricto de medidas preventivas de higiene mediante la utilización de guantes, túnicas y máscaras en caso que existieran riesgos de salpicaduras de ojos y cara.

"El paciente está aislado con las medidas necesarias y suficientes para que este tipo de infecciones no se propague", indicó Edgardo Núñez , jefe del CTI del Sanatorio Mautone. Al momento de detectarse la presencia del microorganismo resistente, explicó Nuñez, los pacientes que compartían la sala con el hombre afectado fueron trasladados a una sala especial.

"La institución tiene la disponibilidad, y de hecho lo hizo, de habilitar otra área del sanatorio que está funcionado como CTI", explicó el jefe del área de cuidados intensivos. Allí se encuentran internados cuatro pacientes, mientras que la persona de 60 años afectada por la infección respiratoria permanece en su sala. Por el momento ninguno de los pacientes con los que compartió la sala manifestaron indicios de portar la bacteria resistente. Sometidos a estudios de control, todos los resultados dieron negativo.

Por su parte, Gustavo Rodríguez, director del centro de salud fernandino, admitió que el sanatorio se encuentra ante una situación "particular". Sin embargo, puntualizó, el tratamiento y las medidas a seguir no son ajenas a la práctica médica habitual.

En una primera instancia el paciente recibió tratamiento con tres antibióticos disponibles en el medio y respondió de forma favorable. Posteriormente, según se informó, el Ministerio de Salud Pública importó dos antibióticos especiales (Fosfomicina y Tigeciclina) frente a los cuales el microorganismo demostró sensibilidad. Las autoridades del centro asistencial confirmaron que el paciente evoluciona con normalidad y que no ha sufrido complicaciones adicionales.

Consultada sobre las partidas de antimicrobianos importados, Raquel Rosa, directora de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, dijo a El País que llegaron el pasado fin de semana y que se conservarán en reserva ante la posibilidad de nuevos casos.

"Se mantienen en custodia, no son de venta libre" ni para las mutualistas ni para el público en general, aclaró Rosa. "Frente a la aparición de un nuevo caso se debe hacer la notificación epidemiológica y si se comprueba la infección por este tipo de bacteria, se libera el antibiótico", indicó. Por el momento, no se han reportado nuevos casos sospechosos.

ESPERABLE. La directora de Epidemiología dijo a El País que así como era "esperable" que apareciera un primer caso, es de prever que se detecten nuevas cepas de la bacteria resistente. "Una vez que está instalada en el país puede verse en cualquiera" de los centros de salud, estimó.

Durante el día de ayer, la misma previsión fue indicada por el infectólogo Eduardo Savio, presidente de la Asociación Panamericana de Infectología. En países de la región, los casos surgieran en hospitales aislados y luego se fueron diseminando.

La bacteria conocida como KPC se transmite a través de la manipulación de materiales utilizados por pacientes infectados mal higienizados, entre personas que la tengan en su organismo y compartan un mismo espacio. También puede ser transportada, sin causar síntomas, por el personal de salud o personas que reciban tratamiento en hospitales de la región contaminados.

Según explicó el microbiólogo Walter Pedreira, en sí la bacteria no resulta dañina para quienes se encuentran bien de salud. Una persona puede tenerla en su organismo en la comunidad y no sufrir ningún tipo de infección.

Sin embargo, en aquellas personas que se encuentran con sus defensas debilitadas, sometidas al uso de respirador y al suministro prolongado de antibióticos, producen infecciones generalizadas difíciles de controlar. En estos casos, indicó Pedreira, la presencia del microorganismo puede acelerar su proceso de gravedad y provocarle la muerte.

Esto puede haber sucedido con una mujer que ingresó al sanatorio fernandino con una infección urinaria y falleció a los pocos días. Los especialistas estiman que puede haberla portado ya que provino de Estados Unidos, donde se encuentra la bacteria.

La paciente la habría transmitido a un hombre que sufría salmonelosis y se encontraba internado en el mismo lugar. Los especialistas afirman que la causa principal de su fallecimiento se debió a la salmonela y que su organismo estaba "colonizado" con la bacteria. Es decir, la transportaba y pudo transmitirla sin que haya contribuido en su proceso infeccioso. El tema se encuentra en estudio. (ver nota aparte).

Como sucedió en el sanatorio de Maldonado, indicó la directora de Epidemiología, los centros que reciban pacientes de la región tienen altas probabilidades de sufrir infecciones por la nueva bacteria. Ante sospechas, indicó Rosa, debe reportarse al MSP.

ALERTA POR la bacteria "Nueva deli"

Europa extrema medidas de precaución ante la aparición de otra variedad de la bacteria resistente, llamada klebsiella pneumoniae productora de NDM-1, un gen que la vuelve resistente también a la penicilina. Se estima que la bacteria ingresó al continente a través de un paciente que viajó desde la India hasta Inglaterra con lo cual 51 de los 77 casos detectados en Europa entre 2008 y 2010 se produjeron en Reino Unido. Francia, Alemania, Italia, España, Estados Unidos y Canadá ya detectaron casos de la nueva bacteria, conocida como "Nueva Deli". Las autoridades uruguayas llamaron a médicos y pacientes a restringir de forma estricta el uso de antibióticos a procesos infecciosos, a efectos de reducir el impacto de microorganismos multirresistentes en el medio local.

Jueza pide investigar historia clínica de paciente fallecido

La jueza penal Adriana Graziuso ordenó a la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Maldonado que se constituyera en el sanatorio Mautone a los efectos de establecer si la presencia de la bacteria KPC se encontraba en la historia clínica de un paciente fallecido el pasado 7 de abril.

Un informe del médico forense Silvio Barbieri entregado a la magistrada días atrás sostiene que la referida bacteria no figura en la historia clínica del paciente.

El paciente fallecido es Ezequiel De Esteffani, argentino, de 30 años, residente en Maldonado, que murió como consecuencia de una "Sepsia entérica" debido a una salmonelosis.

Así consta en el certificado de defunción firmado por un médico del Sanatorio Mautone. Ese es el nombre de una grave enfermedad en la cual el torrente sanguíneo es inundado por bacterias.

Este fue el fin de un periplo que comenzó 48 días antes, el 19 de febrero, cuando Ezequiel y su novia, Laura, probaron un bocado de una croqueta de pescado que había sido comprada por el padre del joven en una marisquería de Maldonado.

"Esto tiene gusto feo", dijo Ezequiel.

Horas después comenzaron las nauseas, los vómitos, los escalofríos, la pérdida de fuerzas y la deshidratación. Laura estuvo tres días lidiando con los síntomas y quince con diarrea, pero Ezequiel no se recuperó. El domingo 20 de febrero fue ingresado al CTI, donde murió el jueves 7 de abril.

Cuatro días después, la familia presentó una denuncia penal por homicidio culpable contra el propietario y los empleados del local gastronómico.

El reportaje completo con la historia de Ezequiel será publicado por El País en el Suplemento Domingo.