Cuevas dio el salto de calidad

Luego de la formidable actuación del salteño en el ATP 500 de Hamburgo, muchos le auguraban a Pablo un rápido acceso a lugares de privilegio de la clasificación. Este cronista era más cauto, basado en que por 2 veces, luego de llegar a semis de Viña en 2008 y 2009, parecía llegar un bajón en los resultados del nacido en Concordia. Por suerte para Cuevas y el tenis de nuestro país, la cautela de quien esto firma fue infundada, fue bueno equivocarme esta vez, y Pablo está edificando una temporada estupenda, al fin de la cual, seguramente quedará entre los 50 primeros del ranking, ambiciosa meta trazada por Cuevas y su equipo a principios de año.

¿Qué mejoró en su juego para que esto ocurriera? Cualquiera que haya jugado al tenis, no importa el nivel, sabe que es un deporte en que lo mental influye tanto o más que la técnica, y allí es donde se ven los mayores avances de la primera raqueta celeste: ahora juega bien los puntos importantes, los que definen los partidos, producto de su gran confianza actual. Lo anterior genera el llamado círculo virtuoso, que es más confianza, mejores resultados, que dan más confianza, etc.

La técnica siempre la tuvo, mas allá que en el mundo super profesional de hoy siempre hay que estar mejorando, al que se queda se lo lleva la corriente, sus golpes son de un nivel que excedía en mucho el ranking que detentaba, ahora se puede decir con satisfacción que su técnica y su posición son consonantes.

Seguramente esta tercera ronda en la Kremlin Cup, primer torneo indoor en la carrera de Pablo no sea el último gran resultado del año.