La juventud de un genio de la escena

GUILLERMO ZAPIOLA

Se estrenó en Madrid el pasado viernes, y participa fuera de concurso en el festival de cine de Venecia. La coproducción hispano-brasileña "Lope", dirigida por Andrucha Waddington, tiene todos los rasgos de un proyecto realmente ambicioso.

Para el director brasileño Waddington, cuyos antecedentes incluyen títulos como Eu, tu, eles, Casa de arena y Gemelas, este film biográfico sobre Lope de Vega, el gran dramaturgo español del Siglo de Oro, bien puede ser la película de su vida. Waddington exploró durante cuatro años la obra de Lope, la historia española de los siglos XVI y XVII, y posteriormente el propio idioma español, antes de lanzarse a la realización de su película.

De hecho, el film nació incluso antes de que Waddington se incorporara a él. Comenzó a gestarse en España en el año 2003, con un primer libreto escrito por Jordi Gasull. Con el proyecto ya en marcha se sumaron Waddington y el guionista español Ignacio del Moral. En la producción terminaron participando el propio director (a través de la empresa Conspiracao Filmes), Gasull, Telefónica Latinoamérica y la cadena de televisión española Antena 3, entre otros.

ROMANCES. La película se centra en un período temprano de la vida de Lope, encarnado por el argentino Alberto Ammann: cuando comienzan a germinar sus primeros éxitos populares y se produce el despertar de dos de sus más conocidos romances, los que mantuvo con Elena Osorio (Pilar López de Ayala) e Isabel de Urbina (Leonor Watling).

En la película, Lope se debate entre el amor de esas dos mujeres, que en la realidad no se conocieron y en cambio se sucedieron en la vida del artista (la segunda se convirtió incluso en su esposa). Solo que, como lo señala el director Waddington, "esto no es un documental, es ficción libremente inspirada en la vida de Lope de Vega". El elenco incluye también a los españoles Luis Tosar, Juan Diego, Antonio de la Torre, Miguel Ángel Muñoz y Jordi Dauder, y a los brasileños Sonia Braga y Selton Mello. El rodaje se llevó a cabo en Esauira y Safi (Marruecos) y en varias localidades españolas.

La historia se inicia con el joven Lope regresando de la guerra a un Madrid en estado de caos, y con su familia pasando por un período económicamente no muy próspero, mientras él se presenta con ropas de marqués robadas y fingiendo que ha hecho dinero. No quiere trabajar, sueña con dedicarse al teatro y vivir de eso, y alterna su vocación por la escena y las mujeres.

Waddington, para quien Lope es la primera experiencia cinematográfica fuera de su país, ha dicho que sintió al film como "un desafío", porque involucraba "un personaje y un universo muy distantes". Sin embargo, agrega, se trató de una experiencia muy buena "porque el cine es un lenguaje común, donde importa que la historia esté bien contada y no en qué lengua se cuente".

El argentino Ammann, premio Goya como actor revelación por el film Celda 211, quien encarna a Lope, definió a su personaje como un David Bowie del Siglo de Oro, añadiendo que era "un poco bestia, pasional, impulsivo, lo que le lleva a cometer errores que le dificultan mucho la vida. Es hasta infantil".

Ammann declara que se sintió instantáneamente atraído por el personaje de Lope de Vega. Lo vivió como una obsesión desde el mismo momento en que habló con el director, a sabiendas de que la vida del personaje es tan motivadora que puede generar decenas de películas. Para él ese trabajo se convirtió en el placer de empaparse en la obra y la historia de un genio.

En la presentación del film el actor recordó que Lope no sólo fue un adelantado que revolucionó la dramaturgia española, sino que "reflexionó hasta el último minuto de su vida", algo que lo engrandeció y le da un valor humano enorme. "Fue una persona feliz, que conoció el éxito, que fracasó, que sufrió mucho, que perdió hijos. Era un hombre de carne y hueso que se atrevió a ser un soñador, a amar la vida y además a escribir", señala también el intérprete. En su opinión, lo mejor del rodaje fue "ese viaje para buscar y tener cosas en la imaginación para recrear el personaje de Lope de Vega".

DAMAS. Las dos principales actrices del film también tuvieron algo que decir acerca de sus personajes. Elena Osorio es "una mujer de vida y carácter complicados, valiente, transgresora y llena de ansias de libertad", sostiene Pilar López de Ayala. Resulta totalmente distinta a Isabel De Urbina, que es "es el sol del mediodía, no tiene sombras", de acuerdo a la visión de Leonor Watling, quien la concibe también como "una groupie", retomando la idea de Ammann de que Lope tiene algo de estrella del rock. Watling afirma también que le encantó trabajar con Andrucha Waddington, a quien considera "un poco como el Sombrerero Loco de Alicia en el País de las Maravillas, que vas donde te lleve".

Tras el estreno de Lope en España y la presentación en los festivales de Venecia y Toronto, la productora y distribuidora Warner evaluará los pasos siguientes a dar. El estreno en Brasil está previsto para el mes de noviembre, y a partir de ahí la película continuará su carrera internacional.

El Siglo de Oro visto desde el Brasil

El director brasileño Andrucha Wad- dington sostiene que Lope es "una película de amor con fondo de aventura que aborda la fundación de un artista". En ello coincide con el colibretista Javier Gasull, quien ve la película como la historia de "un chico joven, con ilusión, que vuelve de la guerra y quiere encontrar su lugar en el mundo". Al presentar la película en Madrid, Waddington añade que entendió que la historia era "muy universal, un joven convirtiéndose en adulto, buscando su sitio y sus primeros amores. Es algo muy contemporáneo, aunque pasara hace 400 años".

El cineasta reconoce que sabía muy poco acerca de Lope de Vega cuando llegó a sus manos el guión de Jordi Gasull e Ignacio del Moral, lo que le permitió "bucear en un universo desconocido" de rimas y sentimientos con forma de palabra. El rodaje, explica el director, fue duro de preparar, pero terminó siendo "un proceso agradable" de un año y cuatro meses, en el que todos los planos y escenas surgieron solos en función de lo que los actores estuvieran dispuestos a dar. Waddington ha hecho saber que "primero construyó el drama y, después, puso la cámara delante de él".

"Filmo a partir de lo que dan los actores, como en el teatro, no hubo `storyboard` en el set, salvo en una escena de acción", señala igualmente el realizador de lo que lo que se propone como uno de los proyectos de mayor presupuesto y ambición creativa de la temporada cinematográfica española.

Tema de uruguayo

Hay un (relativamente) inesperado aporte uruguayo en la producción de Lope, y más concretamente en su banda sonora. Su tema principal, Que el soneto nos tome por sorpresa, ha sido compuesto por el cantautor uruguayo residente en España Jorge Drexler, quien es además pareja de la actriz Leonor Watling, que actúa en la película. Recordar que Drexler ganó un Oscar por su tema para el film Diarios de motocicleta.

El sacerdote, el mujeriego, el gran creador, el monstruo

A Félix Lope de Vega y Carpio (1562-1635) se le atribuyen unos tres mil sonetos, siete novelas, nueve epopeyas y cerca de dos mil piezas teatrales (fuentes más moderadas dicen mil ochocientas), desde la tragedia a la comedia y el drama histórico, así como quince hijos, legítimos e ilegítimos, de trece mujeres distintas.

Se lo llamó el Fénix de los Ingenios, quizás por su fantástica capacidad para renacer de entre sus cenizas, aunque su colega Miguel de Cervantes, le aplicó un calificativo menos piadoso, llamándolo "monstruo de la naturaleza". Fue un trabajador prodigioso, un mujeriego insaciable, ocasionalmente un místico que llegó a recibir las órdenes sacerdotales, y un creador inspirado que dejó una obra monumental. Fue amigo de Quevedo y Alarcón, enemigo de Góngora, y Cervantes lo envidiaba. Y pudo ser el mayor creador del teatro español, si no hubiera existido Calderón.