El "Chino": un oriental en la cima del mundo

DIEGO PEREZ

La mochila con la que Miguel Ximénez arribó hace una semana a la calurosa Asunción del Paraguay es pesada, pero la lleva con orgullo. Trajo en ella y desde Perú 32 goles que hizo en 2008 y que lo pusieron en el podio de los máximos artilleros del año, sólo detrás del argentino Lucas Barrios y el holandés Klass-Jan Huntelaar. "Y lástima que me perdí diez partidos por lesión, más el último de la temporada. Si no capaz que hubiese sido el goleador del año", se lamentó -si así puede catalogarse- el "Chino" mientras disfrutaba, junto al también uruguayo Jorge Bava, de uno de los mediodías libres que tiene el plantel de Libertad, múltiple campeón paraguayo y en plena pretemporada.

Aquellos 32 goles los hizo para el Sporting Cristal, equipo con el que el acuerdo para renovar contrato se demoró a pesar del insistente pedido del técnico Juan Carlos Oblitas ("un fenómeno", según el uruguayo), lo que hizo desistir al goleador de tal posibilidad. Además, sorpresivamente, recibió el llamado de Horacio Cartes, presidente de Libertad, mostrando interés en contar con sus servicios, lo que precipitó su salida del popular equipo peruano y despertó el entusiasmo por la posibilidad de jugar por primera vez la Copa Libertadores, "una gran vidriera, pero más que nada un campeonato que debe ser muy lindo jugar", según el goleador.

La lluvia que lo recibió en Asunción hizo que los primeros días fueran mucho más llevaderos desde el punto de vista climático. Pero ahora, el calor llegó a pleno nuevamente y se sufre, por más que los entrenamientos del "Gumarelo" sean a las siete de la mañana y a las cinco de la tarde. Ese mismo calor es lo que ha hecho que, por ahora, Ximénez apenas haya aprovechado algunos de sus momentos libres para conocer un centro comercial, comer con compañeros y "poca cosa más".

A sus 31 años, el "Chino" siente que está en uno de sus mejores momentos deportivos. Nacido en Montevideo, pero criado en Maldonado, salió del Ituzaingó local para meterse en el fútbol "profesional" de la mano del Deportivo Maldonado. Después pasó por Atenas de San Carlos, volvió al Deportivo y se cruzó de punta para enrolarse en Plaza Colonia. Luego, aprontó las valijas y se fue a Guatemala para jugar en Comunicaciones. Al poco tiempo volvió a Uruguay para defender a Danubio y a Wanderers y otra vez armó las valijas. El destino fue Barranquilla, en Colombia. Sin brillar en el Junior, cruzó la frontera y llegó al Sporting Cristal de Perú. Y explotó, lo que le vale estar ahora en una de las instituciones más respetadas del continente.

"Yo venía de un equipo bien organizado, pero la verdad es que de Libertad siempre me habían dicho cosas muy buenas y en estos días sin dudas me he dado cuenta porqué. Tiene todo lo que un futbolista puede pedir. Además, el presidente demuestra manejar todo con una seriedad tremenda, algo que genera una gran tranquilidad en el jugador", contó Ximénez.

El "Chino" que es uruguayo y llegó a Paraguay con la mochila llena de goles hechos en Perú, ahora quiere una Copa.

Quedó a uno de un "galáctico" y le ganó a Cristiano Ronaldo

Miguel Ximénez quedó en la tercera posición de la tabla de goleadores a nivel mundial en 2008, según el ranking de la Federación Internacional de Historia y Estadísticas del Fútbol (IFFHS). El "Chino" anotó 32 goles jugando para el Sporting Cristal. El máximo artillero del año fue el argentino Lucas Barrios, del Colo Colo chileno, que terminó con 37 anotaciones. El segundo fue el holandés Klass-Jan Huntelaar, que anotó 33 goles para el Ajax y hace unas semanas fichó para el poderoso Real Madrid. Detrás de Ximénez quedó el portugués Cristiano Ronaldo, del Manchester United inglés, quien anotó 31 goles.

"Gumarelo"

En el caballo del comisario

Libertad, del que es hincha el presidente de la Conmebol, Nicolás Leoz, es el tetracampeón de Paraguay. En la Copa comparte grupo con Universitario (Perú), San Lorenzo (Argentina) y San Luis (México).

Ruben Israel dejó su marca

Una huella bien marcada fue la que dejó Ruben Israel, que como le adelantó a Ovación en noviembre, decidió terminar su ciclo de triunfos en Libertad. "El presidente habla maravillas de él", contó Ximénez.