El dinero no es todo en el deporte

Dos realidades diferentes sobre el tapete con motivo de los partidos disputados por Uruguay y EE.UU. en M19 con un triunfo para cada uno.

Por el lado de los celestes una plantilla de técnicos locales de muy baja o nula remuneración, en tanto que los rivales disponen de un aporte técnico internacional -sudafricanos y Reino Unido- financiados por la IRB y sponsoreo proveniente de leyes tributarias que permiten deducciones impositivas a las empresas que apoyen actividades deportivas.

Dos realidades económicas que no se reflejan en el rendimiento de los equipos en el campo de juego, pese al intento de los visitantes de justificar situaciones.

Son las ironías del deporte.

Lo amateur exige inteligencia y optimizar los esfuerzos para sobrevivir, en contraposición de las fórmulas burocráticas provenientes de quienes distribuyen mejor sus recursos.