"Hay cosas que deben ser cambiadas de raíz"

CARLOS MONTAÑO

-Se percibe un ambiente más distendido en Los Aromos.

-Es verdad. Estamos en una semana maravillosa a la espera del inicio de una nueva etapa y con gran ilusión de otorgarle a la gente de Peñarol una felicidad que hace tiempo no tiene.

-¿Los hinchas deberán armarse nuevamente de paciencia?

-Y...hay realidades que dicen que sí. El consejo Directivo realizó un proyecto con vistas a los próximos tres años basado en todo que está llevando a cabo Púa en las divisiones formativas y eso hay que cristalizarlo luego en Primera división. De lo contrario no sirve de nada. Se necesita de tiempo y mechar a los jóvenes con los grandes para que crezcan con jugadores que han obtenido grandes títulos con el club y que les pueden dar muchas prestaciones.

-¿Renuncia a la posibilidad de tener éxito a corto plazo?

- ¡Noooo! Vamos a luchar el futuro y lo inmediato.

- Desde que asumió la conducción técnica se lo notó tranquilo y hasta se hizo responsable de todo lo negativo.

- Cuando uno se brinda con pasión tiene que esperar buenos resultados. El trabajo paga en algún momento.

-¿Qué pudo hacer en las últimas dos semanas?

-Para algunos equipos es mucho tiempo por el hecho que vienen armados y trabajados. Hay otros como el nuestro, que precisan replantearse todo. No es porque lo anterior no sirva. Sencillamente lo hecho estaba planificado para determinadas cosas que no se produjeron y por eso se tuvo que ir el entrenador. Nos damos cuenta que hay cosas que deben cambiarse en profundidad y de raíz. Por eso, puntualmente, le puedo decir que en Peñarol hoy dos semanas equivalen a una hora.

-Asumió el liderazgo y descomprimió el clima que vivía hasta hace pocos días en Peñarol. ¿Fue difícil?

-Como técnico tengo la obligación de ejercer un liderazgo como lo hay a nivel de futbolistas y dirigentes. La convicción marca un hito importante en la vida de cada jugador y entrenador. Creemos sin ver como siempre lo hemos hecho y no tengo ataduras con nadie. Usted sabe como soy yo. Si hubiese un jugador sin fe no estaría jugando conmigo. No tendría necesidad de echarlo. Se iría sólo.

-¿Lo presiona el hecho que Nacional haya ganado el Apertura?

-A mi la presión externa me favorece porque estoy acostumbrado a autopresionarme. Hay que canalizarla bien. Transformarla en una compañera y amiga tuya. Debemos preocuparnos únicamente en lo que atañe a Peñarol. Vivir nuestras alegrías y tristezas. Fijarse en lo que hacen otros es de una mediocridad absoluta.