Seguridad para poder aprender

Es bastante obvio, que uno de los porcentajes mayores de riesgo para tener accidentes, es el de los jóvenes de 18 años que recién acceden a su permiso de conductor.

Pero debemos ser realistas y buscar un balance entre darle movilidad a los jóvenes y asegurarnos que estén protegidos mientras aprenden a conducir y antes de largarlos solos a las calles y rutas.

Porque el hecho de haber ido a una "escuela de conducción" o que el padre o el tío le hayan enseñado a operar los controles del vehículo, no siempre los habilita completamente para saber cómo reaccionar en el tránsito y las consecuencias pueden ser terribles y, lamentablemente, hasta fatales en algunos casos.

El tema es que para sobrevivir en el tránsito, se necesita experiencia.

Y muchas veces los jóvenes no llegan a adquirirla, pues tienen el accidente grave antes de haber llegado a adquirir la experiencia necesaria para haberlo evitado.

La inexperiencia es un factor de riesgo importantísimo.

A pesar de que hay jóvenes con más sentido común que otros, con más responsabilidad y con mayor cautela, es justo reconocer que todos son inexperientes y necesitan una lenta adaptación al tránsito y al comportamiento dinámico de un automóvil y/o moto.