Budapest | Después del torrente de lodo que causó al menos nueve muertos, los ambientalistas advirtieron que otros accidentes letales podrían ocurrir en Europa Oriental y Central, que tiene instalaciones industriales con pobre mantenimiento.
"Pueden ocurrir más accidentes y no solo en Hungría, sino a lo largo de la región", dijo el secretario de Estado de Ambiente húngaro, Zoltan Illes. "La lección del desastre provocado por el lodo es lo que puede ocurrir si las normas en materia ambiental son ignoradas por buscar ganancias".
La semana pasada, unos 757 millones de litros de un barro tóxico se desbordaron de un reservorio, después que se derrumbó una parte de la estructura del mismo.
Nadie ha sido acusado por el caso y recuperó la libertad el propietario de la empresa vinculada al desastre, después de dos días de detención. Su abogado defensor puntualizó que no hay pruebas suficientes para acusarlo.
El desastre suscitó alarma a lo largo de Europa Oriental y Central, donde en las riberas del Danubio hay plantas y minas que quedaron de la era comunista, incluyendo instalaciones para desechos, que tienen materiales potencialmente tóxicos.
Un estudio de 2007 sobre sitios industriales tóxicos, realizado por la Comisión Internacional de Protección del Danubio, identificó 97 lugares contaminados en toda la región. Hungría encabezó la nómina con 32 sitios, seguida de Rumania con 25 y Eslovaquia con 18. Hay preocupación de ecologistas por Rumania, en tanto Bulgaria está retrasada en el cumplimiento de las normas ambientales. THE NEW YORK TIMES