SOFÍA KLICHE
Por dos fechas más (hoy y el sábado 9) se podrá disfrutar de "Flamenco añejo", una propuesta original que resulta tan atractiva para quienes no se relacionan con este arte andaluz como enriquecedora para aquellos que ya se vinculan a él.
Desde las 21 horas y hasta pasadas la 1 de la mañana, la casa de la calle Maldonado 880 con sus viejas habitaciones, escaleras, balcones y un patio trasero al aire libre, se transforma en un viaje hacia las raíces más profundas del flamenco, su riqueza musical e influencia en Uruguay.
La idea y organización surge de la bailaora y egresada de la Escuela Municipal de Arte Dramático Tatiana Ruiz y el propietario de la casa (en donde se realizan esporádicamente actividades culturales que rozan lo under) es Sebastián `Tatú` Ferrari, ambos interesados en sensibilizar y ampliar el círculo de quienes frecuentan espectáculos flamencos en Montevideo.
Instalaciones, performances y shows con algunos de los mejores exponentes del género en nuestro país se desarrollan en simultáneo a lo largo y ancho de la casa, entre espacios y pasillos de luz tenue y ambientación adaptada para la ocasión -vestuario, muebles, objetos- para la cual la casa se presta a la perfección. Mientras suena la música flamenca más pura, la rústica cantina ofrece un plato de olla y algo para tomar.
El recorrido abarca bailes, palos del flamenco, exposiciones, teatro y video. Entre las habitaciones se puede ver, por ejemplo, la performance Flamenco patrimonio de la humanidad que mezcla cante y actuación, referida a la reciente declaración del flamenco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco; o Señas de identidad, un recorrido fotográfico por la familia andaluza Villalba, mojón fundamental en la historia del flamenco en Uruguay, que tiene en su árbol genealógico a Beatriz Villalba, encargada de cantar en el show del próximo sábado 9.
Entre nuevas instalaciones y artistas, para las últimas dos fechas seguirán deambulando por la casa los "habitantes", extraña pareja que se pasea entre los visitantes (unas 200 personas asistieron el pasado sábado), como si vivieran entre esas paredes desde tiempos remotos, desde que el flamenco no era aún una música universal.
La propuesta, a través de ópticas subjetivas pero nunca agotables en sí mismas, y una casa pintoresca y un poco derruida en algunos rincones, acerca al público esta honda, antigua y a la vez tan vigente disciplina.
En la noche de hoy estarán Ayllú Almada (cante), Gonzalo Franco y Maikel Pereyra (guitarras), Gerardo Martínez (percusión), Cecilia Sarasola y Marcelo Santa Cruz (baile): y en la del sábado 9 de abril, Beatriz Villalba (cante), Maikel Pereyra y Pedro Carro (guitarras), Jonathan Acosta (percusión) y Dayana González y Tatiana Ruiz (baile). Las entradas se venden a $70.