México mira con cautela a candidatos presidenciales

GUADALAJARA | THE NEW YORK TIMES

Ya comenzó la campaña presidencial en México. Esencialmente, es una batalla, bromean comentaristas cínicos, entre el "Niño Bonito", la "Muñeca Quinceañera" y el "Cansado Ya Fue".

El desdén que emana de estas descripciones comunes de los tres candidatos principales refleja lo que los expertos dicen son bajas expectativas. El electorado mexicano, muestran las encuestas, ha perdido fe en la democracia.

Se trata de un país de mensajes contradictorios, de crecimiento económico y cabezas decapitadas. Es el tercer mayor socio comercial de Estados Unidos y un país mayoritariamente de clase media, pero que se ha retrasado por la corrupción, la impunidad, la pobreza, la burocracia, los monopolios y una cultura de malestar con confrontaciones.

Quien quiera que gane el 1° de julio heredará un México desilusionado y atorado, atrapado entre fuerzas del pasado que se resisten a cambiar y la frustración de quienes han empezado a esperar más.

DIFICULTADES. El crimen en particular requiere atención inmediata. Han muerto más de 50.000 personas en asesinatos relacionados con el narcotráfico desde finales de 2006, y el sistema judicial es una farsa: no se castiga a más de 98% de los delitos, según estudios de datos gubernamentales.

"México está en una encrucijada en términos de lidiar con el crimen organizado", dijo Pamela K. Starr, una experta en política mexicana en la Universidad del Sur de California. Refiriéndose al actual presidente, dijo: "Está bastante claro que el gobierno debe terminantemente confrontar al crimen organizado, y está totalmente claro que no ha funcionado la estrategia de Felipe Calderón".

El sector petrolero del país también necesita una reestructuración para darle un giro a Pemex, el monopolio paraestatal con pérdidas de dinero, y traer inversión privada para desarrollar las nuevas reservas.

Entre tanto, la inmigración ilegal hacia los Estados Unidos a la baja tiene el potencial de alterar la dinámica de las relaciones mexicano-estadounidenses.

La mayoría de los electores, acostumbrados a un gobierno insensible tras décadas de un régimen unipartidista, no esperan que ni siquiera se ocupen de estos desafíos.

Y, no obstante, los primeros actos oficiales de campaña revelaron más de lo que podría haberse esperado. Hubo menos propuestas políticas. Sin embargo, la contienda de este año es más corta debido a nuevas leyes, así es que para los tres candidatos los últimos días fueron el inicio de una carrera de tres meses rumbo a las elecciones, durante los cuales deben responder las preguntas centrales para sus candidaturas.

CANDIDATOS. Enrique Peña Nieto, el puntero telegénico, llamado "Niño Bonito" (o "Chico Gel", por el peinado), necesita persuadir a los votantes que representa a una Partido Revolucionario Institucional, o PRI, nuevo, no corrupto, que gobernó a México de 1929 a 2000. Sin embargo, ¿puede probar que no sólo es un bonito adorno que está arriba de un viejo partido autoritario?

Josefina Vázquez Mota, una exsecretaria de Educación del gobierno actual, tiene, quizá, un reto mayor. La llaman la "Muñeca Quinceañera", porque siempre está sonriendo, pero su partido - el PAN o Partido Acción Nacional - ha estado a cargo durante 12 años del país, una época en la que ha aumentado la violencia y continuado la corrupción. ¿Puede acaso ella convencer a los mexicanos de que representa un rompimiento de su partido y convertirse en la primera presidenta del país?

E, incluso, para Andrés Manuel López Obrador, un liberal y exalcalde de la Ciudad de México que perdió las elecciones anteriores por 0,6 punto porcentual, compiten el pasado y el futuro. El candidato de más edad, a quien a veces lo llaman "Cansado Ya Fue", debe responder a la pregunta de si ha dejado de lado el populismo radical de su campaña anterior para gobernar como un moderado.

CAMPAÑAS. Aun antes de que apareciera Peña Nieto, de 45 años, a las 12:01 del viernes 30 de marzo, momento en el que podía iniciar su campaña, el mitin en Guadalajara se sentía más como una fiesta de victoria que del comienzo de una contienda. Miles de partidarios llenaron una de las principales plazas de la ciudad para escuchar el discurso cargado de promesas y con pocos detalles.

Criticando "plagas" como la pobreza, la inseguridad y la corrupción, ofreciendo cambio y "luz y esperanza", Peña Nieto exaltó las emociones de la multitud. "La preocupación aflige la vida de muchas personas", dijo.

Y con una gran sonrisa, elogió a las mexicanas por su fortaleza, y luego firmó públicamente un cartel con la lista de sus principales promesas.

Vázquez Mota también empezó su campaña temprano, con un mitin más reducido en las oficinas centrales de su partido en la Ciudad de México, donde inmediatamente argumentó que los años de control del PRI "todavía nos están deteniendo".

"¿Qué te gustaría ver diferente?", preguntó una y otra vez, en un salón de clases de segundo año en la primaria a la que asistió cuando era niña. "Si trabajamos duro, todos los sueños son posibles", dijo.

López Obrador, de 59 años, sin corbata ni saco, golpeó el podio mientras sudaba profusamente bajo el sol abrasador en Macuspana, su ciudad de origen, como si estuviera determinado a desmentir lo que admitió recientemente en cuanto a que tiene "menos vigor" ahora, durante su segunda postulación para la presidencia.

Los otros candidatos, dijo, "representan lo mismo". Sólo su campaña representa la alternativa de "honestidad, justicia y amor, mucho amor". Él aún se niega a reconocer que perdió en 2006, insistiendo en que fue un fraude. Dijo a los electores que uno de los mayores desafíos del país es asegurar que se pueda confiar en los resultados electorales.

Sondeos claros

De acuerdo con los últimos sondeos, Peña Nieto tiene una cómoda ventaja del 45% de la intención de voto, por delante de Vázquez Mota (32%), y seguidos por López Obrador (22%).

Los candidatos realizarán un primer debate el 6 de mayo. Aún queda por definir la fecha de un segundo debate público. También hay que definir el formato del encuentro y quién será el moderador. ANSA