Cumbre con ravioles

SAN JOSÉ | JOSÉ LUIS ÁLVAREZ

Juan Pedro Damiani y el Esc. Edgar Welker, presidente y vice de Peñarol, respectivamente, arribaron exactamente a las 20:50 de la pasada jornada al Hostal Punta Pueblo, en el Audi azul -matriculado en Maldonado- del titular aurinegro.

"despiste". El alojamiento donde está el plantel principal se encuentra ubicado en la intersección misma de las rutas 11 y 23, por lo que el moderno vehículo, a regular velocidad, pasó por la puerta del lugar, sin notarlo, a raíz de lo cual debió tomar la rotonda que hay cincuenta metros más adelante, para regresar hacia el complejo.

Varios jugadores se encontraban en la amplia piscina del hostal y fueron los primeros, luego de Mario Saralegui, en acercarse a saludar a la dupla directriz. También lo hicieron Ruben Paz y el Prof. Diego Souza, que se confundieron en un gran abrazo con los dirigentes.

cena. La reunión entre Damiani, Welker y Saralegui se inició al aire libre, junto a la cabaña que ocupan el técnico y el preparador físico, donde rápidamente se arrimaron varias sillas que fueron colocadas en rueda. Posteriormente fue servida la cena; de entrada hubo fiambre y ensaladas, y como plato principal ravioles con peceto.

Al mediodía los aurinegros habían almorzado asado al horno con papas y boniatos.

"Chicha", la encargada de las mucamas y supervisora de la cocina, elogiada por todos en los últimos días ya que se desvive durante toda la jornada, confesó que lo hace "porque es mi trabajo, pero también, porque soy `manya` fanática". En cambio, Ulises Bentancor, que es un afamado fabricante de pastas maragato que elaboró los ravioles que saborearon los aurinegros, no solo reivindicó su condición de fanático "bolso", sino que hasta anoche fue técnico del Nacional de San José.

Precisamente, antes de irse para firmar como nuevo entrenador de otro equipo tricolor -el Campana de Libertad- Bentancor enfatizó, no sin ironía, que "es mi trabajo, además les hago las pastas porque en este grupo está mi gran amigo Ruben Paz".