Clásico pintado de azul

RAÚL TAVANI

Cruzeiro le ganó 4 a 2 al Atlético Mineiro y por consecuencia, no solamente se quedó con el clásico de Minas Gerais disputado en el Estadio Centenario por la Copa Bimbo, sino que además, será finalista del mencionado cuadrangular internacional de verano.

Pese al intenso calor y que el partido comenzó a una hora inapropiada para jugar al fútbol, hinchas de ambos clubes apostados en la Tribuna América en un número aproximado a 600, le pusieron un marco de clásico al partido. Y como tal, los jugadores en la cancha se brindaron plenamente, incluso, el árbitro Jorge Larrionda, les concedió un descanso extra en cada tiempo para que tomaran agua.

Con ese panorama, en el primer tiempo se vieron dos equipos con estilos totalmente diferentes. Atlético Mineiro es una escuadra un tanto rígida, similar en muchos aspectos a lo que se observa comúnmente en el fútbol uruguayo y por consecuencia, diferente, al menos por lo mostrado ayer, a lo que habitualmente presentan los equipos brasileños.

Del otro lado, Cruzeiro, intenta desplegar un fútbol moderno, donde los únicos que se mantienen rígidos en sus puestos son los corpulentos zagueros, Leo Fortunato y Thiago Heleno, mientras que los laterales, Jonathan y Fernandinho, por momentos, se mueven como carrileros y los volantes, que son solidarios intentan cubrirlos, pero no siempre lo hacen bien.

Por consecuencia, Cruzeiro parece tener una idea muy clara cuando tiene la pelota en su poder y piensa solamente en el arco rival. Pero, deja dudas cuando lo sorprenden a velocidad y fundamentalmente por afuera, ya que los dos zagueros centrales, muchas veces quedan mano a mano con los atacantes rivales.

Es indudable que ayer, Emerson Leáo, el técnico de Atlético Mineiro, no largó a su equipo en el primer tiempo, pero así y todo, en un par de oportunidades, los atacantes quedaron con los necesarios espacios para comprometer a la defensa rival y se mostraron incapaces de aprovechar esas situaciones.

Entonces, con Cruzeiro con el arco rival entre ceja y ceja, fue lógico que la primera etapa terminara 3 a 1, es de destacar que en el tercer gol, quedaron tres jugadores de Cruzeiro contra uno de Atlético Mineiro y pasó lo que tenía que pasar: fue un golazo.

Pero Leáo hizo tres cambios para el inicio del complemento y en parte, al menos para emparejar en el trámite del juego, le dio resultado, incluso, su equipo se puso a un gol de diferencia del rival, pero Mineiro dio todo lo que pudo. Mientras que del otro lado, Cruzeiro controló el juego acertadamente y cuando se lo propuso, a los 90`, luego de un desborde, la pelota llegó al área y Soares liquidó todo.

Por consecuencia, Cruzeiro en la final, puede ser complicado contra Nacional. No es un gran equipo, aunque por su movilidad, en ocasiones se torna peligroso, pero defendiendo concede muchas ventajas.

La cifra

2 Son los defensas del Cruzeiro que por momentos quedan en forma solitaria en el fondo.

Marquinhos Paraná

El volante central de Cruzeiro, Marquinhos Paraná, es el motor del equipo. Marca y con la pelota en los pies juega muy bien.

Emerson Leáo

En el segundo tiempo, cuando Leáo largó a su equipo hacia adelanto, dejó mudos a los hinchas de Cruzeiro, pero no le alcanzó.